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La importancia de tener una buena herencia en la cocina

Por: Cocina Vital 31 Mar 2023

A unos días de haber inaugurado mi primer restaurante, un sueño que he tenido desde los 5 años, quiero compartir cómo se fue materializando esta idea desde tres generaciones atrás.


La importancia de tener una buena herencia en la cocina
COCINA VITAL

Mi sueño viene porque mi abuela “Cony”, como le decimos de cariño, es una gran cocinera y yo desde niña veía la pasión que ella ponía en la cocina, el cariño con el que ella realizaba y mejoraba sus recetas. Desde muy joven comenzó a cocinar, sin ninguna preparación profesional, más que su gusto, unas cazuelas y una cuchara de madera, que eran las herramientas que tenía para poder llevar a cabo el trabajo que por muchos años la ayudó a sacar adelante a sus hijos.

Ella preparaba comidas para los conductores de una ruta de camiones y algunos trabajadores de la construcción en la Ciudad de México, y cada vez tenía que hacer más comida y, también, modificar sus recetas para darle variedad a sus clientes.

Conforme mi madre iba creciendo, fue necesaria su ayuda en la cocina, tuvo que aprender las recetas que mi abuela había ido juntando a lo largo de muchos años. Con el tiempo, mi madre vio que la forma en la que mi abuela había iniciado el negocio y lo había hecho crecer, resultaba ser muy cansado, porque cocinaban en casa y luego tenían que transportar la comida hasta los puntos de las entregas, lo cual hacía el trabajo cada vez más pesado. Poco a poco mi madre se fue involucrando cada vez más y a medida que lo hacía, tomaba más responsabilidad y decidió hacer un cambio en el negocio, tomó la decisión de rentar un local, ahí mismo cocinar y servir la comida.

Así se convirtió el negocio de mi abuela en una cocina donde ya servían un menú y algunos pedidos especiales en lo que hoy conocemos como cocina económica, y ahí comenzó la historia de mi madre. En algún momento trabajamos las tres en esa cocina, mi abuela y mi madre cocinando, que lo hacían con mucha pasión y cariño por entregar un platillo rico y por complacer a sus comensales y yo limpiando mesas, sirviendo aguas o refrescos, tomando comandas, limpiando platos, pero la pasión que veía en mi madre y en mi abuela por la cocina me hicieron plantearme esa meta, que un día tendría un restaurante.

Con ese negocio llegó la época donde el trabajo duro prosperó, con eso, además que mi madre ayudaba con los gastos del hogar a mi padre, y aunado a todo lo que yo había aprendido de ella y de mi abuela, tuve la invaluable oportunidad de ir a estudiar gastronomía al extranjero.

Conforme ha ido transcurriendo el tiempo, y con los cambios y el crecimiento en la tecnología dentro de esta profesión, ahora tengo material y herramientas que me ayudan a tener una mejor técnica de cocina, y en combinación con el sazón que he heredado de estas dos grandes mujeres que son mis heroínas, ha sido lo que me ha hecho destacar; gracias a todo esto, tuve la oportunidad de trabajar en algunos de los hoteles y restaurantes más importantes de la Ciudad de México, y también en países como Francia e Italia, donde desarrollé un gusto por el vino, y precisamente te cuento esto sentada en mi mesa de trabajo con una copa de un vino Coolwine que se ha convertido en uno de mis vinos favoritos para pasar una tarde mientras como una pizza o tal vez acompañando una tarta de manzana, mientras me inspiro y saco ese #ModoCool que define mi pasión por la cocina.

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