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4 problemas por las que el bambú de la suerte se vuelve amarillo y soluciones que realmente funcionan

Por: Ximena Ruíz 09 Dic 2025
4 problemas por las que el bambú de la suerte se vuelve amarillo y soluciones que realmente funcionan

El bambú de la suerte, aunque resistente, es sensible a ciertos factores ambientales que impactan directamente en su salud. Te decimos qué podría estarle haciendo daño.


El bambú de la suerte (Dracaena sanderiana) se ha convertido en un favorito en muchos hogares y oficinas. Más que una simple planta, se le considera un símbolo de prosperidad, energía positiva y buena fortuna, lo que lo hace un regalo popular y una pieza central llena de encanto. Sin embargo, aquí sabrás por qué un bambú se pone amarillo y cómo solucionar este problema. Además, conoce el significado de poner un listón rojo en bambú de la suerte.

No te preocupes, no es necesariamente un mal augurio. A menudo, este cambio de color es una clara señal de que tu pequeña planta necesita un ajuste en sus cuidados. Entender la causa es el primer paso para devolverle ese verde vibrante que tanto lo caracteriza.

Por qué un bambú se pone amarillo

El bambú de la suerte, aunque resistente, es sensible a ciertos factores ambientales que impactan directamente en su salud. El amarillamiento suele estar ligado a uno de los siguientes problemas:

1. La Calidad del Agua

Esta es, con frecuencia, la razón principal. El bambú de la suerte es muy sensible a los químicos presentes en el agua del grifo, especialmente el cloro y el flúor. Estos elementos se acumulan en el tejido de la planta, causando que las hojas y, eventualmente, los tallos se tornen amarillos.

  • Solución Efectiva: La mejor alternativa es usar agua destilada, agua de lluvia o, en su defecto, agua embotellada o agua del grifo reposada. Si utilizas agua del grifo, déjala reposar en un recipiente abierto durante al menos 24 horas. Esto permite que el cloro se evapore significativamente antes de que la planta la absorba. Además, recuerda cambiar el agua completamente cada 7 a 10 días para evitar la proliferación de algas o bacterias, riega tu bambú con una cantidad de agua moderada.

Agua bambú

Cuida cómo riegas las plantas, quita el cloro del agua de la llave y no lo riegues muy poco o en exceso. Foto: Semana

2. Exceso de Sol, ¡no la quemes!

Aunque el bambú de la suerte necesita luz, no tolera el sol directo. Es una planta que prospera en el sotobosque, por lo que la luz intensa actúa como un potente agente blanqueador, quemando sus hojas.

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  • Solución Efectiva: Traslada tu bambú a un lugar donde reciba luz indirecta brillante. Una ventana orientada al norte o un punto donde la luz sea filtrada por una cortina delgada es ideal. La luz debe ser suficiente para leer cómodamente, pero sin que los rayos solares incidan directamente sobre la planta.

3. Sobrealimentación o Falta de Nutrientes

En general, el bambú de la suerte requiere muy poco fertilizante, especialmente si está creciendo sólo en agua. Un exceso de sales minerales puede quemar sus raíces y causar el amarillamiento. Por otro lado, la falta de nutrientes esenciales, como el nitrógeno, también puede manifestarse con un color pálido.

  • Solución Efectiva: Si tu bambú está en agua, usa fertilizantes muy diluidos, específicos para bambú o de liberación lenta. Lo ideal es añadir solo una gota de fertilizante líquido cada dos meses, no más. Si está en tierra, asegúrate de usar un sustrato bien drenado y fertiliza con moderación durante la primavera y el verano.

4. Problemas de Raíz: Pudrición

Cuando el agua no se cambia con regularidad o el medio de cultivo (si está en tierra) retiene demasiada humedad, las raíces pueden pudrirse, impidiendo que el bambú absorba nutrientes y agua correctamente.

  • Solución Efectiva: Si notas que la base del tallo está blanda y amarilla, o las raíces tienen un olor desagradable, deberás actuar. Corta la parte dañada del tallo con un cuchillo esterilizado y sella la herida con cera de vela derretida para prevenir infecciones. Puedes colocar la parte sana del tallo en agua fresca para que desarrolle nuevas raíces.

Tierra bambú

Recuerda no usar muchos fertilizantes, puede afectar al bambú. Foto: infocampo.

Ver que tu bambú de la suerte se torna amarillo no es el fin del mundo. Con un poco de atención a la calidad del agua, un buen lugar con luz indirecta, y una nutrición equilibrada, pronto verás cómo tu planta recupera su salud y sigue atrayendo prosperidad a tu hogar. ¡Tu toque familiar y cariñoso es el ingrediente secreto!

Además de saber por qué un bambú se pone amarillo, te puede interesar conocer las 5 plantas más poderosas para atraer energía positiva en noviembre y dónde colocarlas, según el Feng Shui.

  • Ximena Ruíz
    Ximena Ruíz Redacción y Producción Estudiante de último semestre en la Licenciatura en Comunicación y Medios Digitales. Creadora y redactora de contenido.
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