¿Sirve comer helado cuando hace frío?
¡El helado puede ser más efectivo que un chocolate caliente!
Con el clima frío se antoja envolverse en una cobija y tomar bebidas calientes. Sin embargo, de vez en cuando no falta la recomendación de comer helado u otras cosas frías para “aclimatarse”.
Pero, qué tan cierto es que comer helado cuando hace frío, nos puede ayudar
El helado está hecho de leche, generalmente frutas y azúcar, todo lo cual brinda un gran aporte de carbohidratos que nos dan energía y nos ayudan a mantener nuestra temperatura corporal. Por lo que aunque en primera instancia creas que estás refrescando tu cuerpo, de hecho le estás aportando más calorías para quitarte el frío.
Lo mismo ocurre con bebidas azúcaradas y otros alimentos con alto contenido calórico. Y es que el ser humano controla su temperatura independientemente de las condiciones del entorno: es más importante lo que comemos y otros procesos internos -llámese metabolismo- que el entorno, para mantener nuestra temperatura.
Peter Poortvliet, de la Universidad de Queensland, señala que aunque parezca contraintuitivo, lo cierto es que las bebidas calientes no nos ayudan tanto a quitar el frío; de hecho hacen que el organismo se enfríe más, ya que activan la respuesta de transpiración en el cuerpo, lo que nos enfría. Por lo que el helado sería más efectivo para quitarte el frío que un café o chocolate caliente.
¿Y qué pasa si estoy enfermo de la garganta?
Nos han dicho que debemos evitar el helado cuando tenemos la garganta inflamada, pero lo cierto es si tienes dolor, el helado es una opción excelente para contrarrestarlo. Si bien las bebidas calientes o un rico caldo de pollo son reconfortantes ante este malestar; lo cierto es que un helado o un yogurt frío pueden ayudar más a desinflamarla.
Además, el helado está lleno de beneficios:
- Aportan mucho calcio, lo que ayuda a fortalecer nuestros huesos y dientes Te recomendamos este video
- Tiene muchas proteínas, vitaminas y minerales
- Nos pone de buen humor
Así que ya sabes, puedes disfrutar de tu helado en invierno para combatir el frío; –y además no tendrás que preocuparte de que se derrita como en otras temporadas más calurosas–