La crema de flor de calabaza es un platillo ligero, nutritivo y lleno de tradición, perfecto para sorprender a tus seres queridos o disfrutar en cualquier momento del día.
En una olla, AGREGA aceite de oliva y sofríe el ajo y cebolla.
AGREGA los granos de elote y fríe por 5 minutos.
AÑADE la flor de calabaza y el caldo de pollo. Cocina por 5 minutos.
PASA a la licuadora todo lo que consiste en la olla y agrega el queso crema.
En la misma olla, DERRITE mantequilla y agrega la cucharada de harina.
VACIA lo que licuaste a la olla, sazona con sal y pimienta. Cocina por 5 minutos.
Si gustas, puedes agregar leche para aligerar un poco la crema.
SIRVE y acompaña con croutones.
NOTAS
¿Sabías que la flor de calabaza ha sido un ingrediente clave en la cocina mexicana desde tiempos prehispánicos? Los antiguos aztecas ya la utilizaban en sus platillos debido a su sabor suave y sus propiedades nutritivas. Además, esta delicada flor es rica en vitaminas A y C, así como en minerales como el calcio y el hierro, lo que la convierte en un ingrediente no solo delicioso, sino también muy saludable. Un verdadero tesoro culinario que ha perdurado a través de los siglos.