¿Es realmente necesario salar el agua de la pasta? Barilla te explica la ciencia de salar a tiempo tu pasta.
La pasta es un alimento sumamente versátil y apreciado en la cocina. Se trata de un producto elaborado a base de harina de trigo o sémola de trigo duro. Su popularidad se debe a su sencillez de preparación, su costo asequible y su capacidad para combinar con una amplia variedad de ingredientes. Además, te puede interesar 7 consejos para cocinar una pasta perfecta y sin que se bata.
La sal es un ingrediente crucial que realza el sabor de los alimentos, y la pasta no es una excepción. Al agregar sal al agua en la que se cocina la pasta, se logra mejorar su sabor desde el interior. La sal penetra en la pasta durante la cocción, lo que contribuye a una experiencia más sabrosa al morderla.
La sal también desempeña un papel importante en la textura de la pasta. Al agregar sal al agua, se promueve una interacción más efectiva entre la pasta y la salsa que se le añade posteriormente. La sal en la superficie de la pasta hace que la salsa se adhiera mejor a ella, lo que resulta en una mezcla más homogénea de sabores en cada bocado.
“El momento perfecto para salar el agua es justo cuando hierve, justo antes de echar la pasta”, afirma Boni. Tarde o temprano en el proceso, es posible que no obtenga los mismos espaguetis o rigatoni perfectamente condimentados.
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