Asa los chiles en un comal. Debe ser rápido para evitar que se quemen y se amarguen.
Remoja los chiles en agua caliente por 10 minutos y escurre.
Licúa el jitomate, la cebolla y el ajo, previamente asados junto con los chiles, sal y pimienta, hasta obtener una mezcla cremosa. Si es necesario agrega un poco de caldo. Cuela.
Fríe los fideos en una cazuela caliente con aceite hasta que estén dorados. Mueve para evitar que se quemen.
Agrega la salsa y cocina por 5 minutos aproximadamente. Baja el fuego cuando comience a hervir.
Incorpora el caldo y mezcla, deja en el fuego durante 7 minutos o hasta que la salsa esté cocida.