Ni en el refrigerador, ni el frutero: este es el lugar ideal para guardar las fresas y evitar que se pudran

Son bonitas, jugosas y llenas de sabor, pero las fresas también se encuentran entre las frutas más delicadas que tenemos en la cocina. En pocos días, pueden volverse blandas, oscurecidas y no aptas para el consumo. Pero la buena noticia es que, con unas sencillas precauciones, es posible conservar las fresas frescas durante mucho más tiempo sin tener que recurrir al refrigerador o dejarlas expuestas en el frutero. Por ello, aquí te decimos dónde guardar las fresas de manera correcta. Además, descubre cómo desinfectar correctamente las fresas y evita la cisticercosis.

Descubre la mejor manera de conservar las fresas durante más tiempo y evitar el desperdicio.

¿Qué hay de malo en guardarlo en el refrigerador o en el frutero?

Aunque parezcan soluciones obvias, el refrigerador y el frutero no son los lugares más adecuados para conservar las fresas. El frío excesivo en el refrigerador tiende a cambiar la textura de la fruta, dejándola acuosa y sin sabor. El árbol frutal, en cambio, al estar a temperatura ambiente y expuesto a la humedad, acelera el proceso de deterioro.

El árbol frutal, en cambio, al estar a temperatura ambiente y expuesto a la humedad, acelera el proceso de deterioro.

¿Dónde guardar las fresas para que no se echen a perder?

Lo ideal es usar un frasco hermético con tapa, forrado con toallas de papel en la parte inferior. Las fresas deben estar muy secas, sin lavar, y deben distribuirse en una sola capa para evitar que se doren. Deje la tapa entreabierta o taladre pequeños agujeros para permitir que circule el aire.

Este frasco debe almacenarse en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa, como una despensa ventilada. De esta manera, prolonga la vida útil de la fruta por más tiempo, sin comprometer la textura o el sabor.

Este frasco debe almacenarse en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa, como una despensa ventilada.

Consejo extra: limpieza con vinagre

Antes de guardar, puede desinfectar las fresas con una solución de vinagre blanco diluido en agua (1 parte de vinagre por 3 partes de agua). Déjalo en remojo durante unos dos minutos, luego sécalo bien con toallas de papel. Este baño de vinagre ayuda a eliminar las bacterias y las esporas de moho que pueden acelerar la putrefacción.

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