Estar a dieta vs cambiar tu dieta

Cuando queremos bajar de peso es común que busquemos dietas que nos ayuden a perder peso “en poco tiempo”, “sin hambre” o quizá “dietas saludables”. Recurrimos a estas dietas especialmente cuando tenenemos cerca un evento importante o quizá porque nos lo propusimos como propósito de año nuevo.

El problema es que habitualmente vemos las dietas como algo temporal y una vez que cumplimos el plazo o alcanzamos nuestro objetivo -o incluso porque nos hartamos-, regresamos a los hábitos que nos hicieron subir de peso en primero lugar.

No es lo mismo estar a dieta que aprender a comer más sanamente; lo segundo es más sano y más duradero

La palabra dieta no se refiere a una restricción en los alimentos, sino simplemente a lo que comemos a lo largo del día. Y si en lugar de enfocar nuestros esfuerzos en “aguantar” un par de semanas a dieta para perder unos kilos; nos enfocaramos en hacer el hábito de comer mejor y aprender a mejorar nuestra dieta, obtendríamos mejores resultados.

Razones para NO estar a dieta

Establecer un plazo sólo nos hace anticipar el momento en que termine y esto no sirve para construir hábitos. Las dietas pueden ayudar a aprender a comer, siempre y cuando sirvan como una guía para tomar mejores decisiones y de forma gradual aprendamos a comer mejor; es por eso que es mejor que sea con la ayuda de un nutriólogo que nos oriente en el proceso.

Las dietas que prometen resultados en poco tiempo suelen estar mal balanceadas y pueden causar desequilibrios en nuestro organismo.

Ponerte constantemente a dieta -y las subidas y bajadas constantes- hace que a la larga tu organismo genere una resistencia y sea más difícil bajar de peso.

Tener alimentos prohibidos solo hace que se nos antojen más y la dieta se convierte en un tormento; por eso nos cuesta tanto trabajo seguir el régimen. Es mejor aprender cuánto podemos comer de cada cosa, en lugar de eliminarlo por completo.

Razones por las que SÍ te conviene hacer cambios en tu dieta

Aprender a comer mejor y tener una dieta balanceada nos ayudará bajar de peso sanamente y mantenernos en nuestro peso una vez que lleguemos ahí. Eso sí, será necesario combinar la dieta con el ejercicio para tener mejores resultados y ser paciente.

Estimula tu creatividad y pruebas cosas nuevas. Una de las razones por la que las dietas fallan es que la comida no es antojable; creemos que comer sano se reduce a ensaladas y verduras. Pero comer sano no es sinónimo de no comer rico. Hay muchas cosas deliciosas y sanas que puedes incluir en tu dieta; lo importante es aprender a hacer un balance de nuestros alimentos. Checa algunas de nuestras recetas de comida sana para darte una idea.

Si te gustan mucho los dulces o las cosas grasosas, pueden formar parte de tu dieta siempre y cuando se coman con moderación y lo equilibres bien con el resto de tus alimentos a lo largo del día.

Si bien no hay alimentos malos o prohibidos, esto no es excusa para comer lo que sea libremente. Se trata de las porciones y la frecuencia con la que comes los alimentos. Debemos moderar nuestro consumo de azúcares y harinas refinados; y favorecer el consumo de verduras y alimentos ricos en fibra. Pero a medida que aprendamos a elegir mejor, también nuestro paladar se acostumbrará a disfrutar más de las cosas sanas y ricas.