¿Por qué es importante ajustar la alimentación de nuestras mascotas cuando hace frío?

Con la llegada de los meses más fríos, las familias comenzamos a sacar las bufandas, encender la calefacción y preparar bebidas calientes. Pero, ¿hemos considerado si nuestros compañeros de cuatro patas, perros y gatos, también necesitan un ajuste en su rutina, especialmente en su alimentación? Mantener una dieta para mascotas es clave para que conserven su vitalidad y salud durante el otoño y el invierno. La respuesta de los especialistas en veterinaria es clara: sí, es importante revisar y posiblemente modificar su dieta, teniendo en cuenta factores como su nivel de actividad y las bajas temperaturas. Además, checa las marcas de croquetas para perro que solo debes darle a tus mascotas según Profeco.

Por qué debes cambiar la comida de tu mascota cuando hace frío

El Dr. Sebastián Robledo, vicepresidente de la Federación Veterinaria Argentina, subraya un punto crucial: los perros que se mantienen activos incluso con el frío necesitan una dieta más rica en calorías y proteínas. Este aporte extra es fundamental para que su organismo pueda generar el calor necesario y mantener una temperatura corporal adecuada, contrarrestando el ambiente gélido.

Esta recomendación es respaldada por instituciones de prestigio. Por ejemplo, la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) coincide en que la dieta de perros y gatos debe volverse más rica en ciertos nutrientes clave a medida que bajan las temperaturas.

Descubre cómo modificar la alimentación de tus mascotas en esta época de frío. Foto: Rovinfood.

Pilares nutricionales para tus mascotas

• Proteínas:  Son esenciales para fortalecer el sistema inmune, que puede verse comprometido por los cambios de clima, y para el mantenimiento de la masa muscular. Los expertos sugieren que el alimento que consuman contenga idealmente alrededor de un 25% de proteína bruta. Un buen porcentaje asegurará que estén fuertes y listos para cualquier juego o paseo.
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• Lípidos (Grasas):  Las grasas son las principales proveedoras de energía y aportan ácidos grasos esenciales, indispensables en esta época. Ingredientes como las grasas de pollo o cerdo, o los aceites de pescado, ofrecen esas calorías adicionales que actúan como un combustible vital para combatir el frío ambiental. Sin embargo, este aporte debe ser balanceado.
• Carbohidratos: Nutrientes como el arroz o la avena son excelentes proveedores de energía, ayudando a que la mascota mantenga su temperatura corporal estable. Es crucial, no obstante, que su consumo sea regulado. Un exceso de carbohidratos, combinado con una posible disminución en la actividad física (si la mascota es más casera en invierno), puede conducir fácilmente al sobrepeso, lo que a su vez trae complicaciones de salud.
• Vitaminas y Minerales: Hay un grupo de micronutrientes que se vuelven especialmente relevantes. Las vitaminas A, C, y E, junto con los ácidos grasos Omega-3, son vitales para proteger la piel y fortalecer el pelaje de su animal de compañía. Un pelaje sano y fuerte actúa como una barrera natural adicional contra las bajas temperaturas, manteniendo el calor corporal.

Modifica la alimentación de tus macotas para mantenerlas sanas al integrar las anteriores recomendaciones. Foto: Shutterstock.

El invierno no sólo trae consigo cambios en el clima, sino también en las necesidades metabólicas de nuestras mascotas. Ajustar su alimentación no se trata de darles más comida, sino de asegurar que la que reciben sea de mayor calidad nutricional y densidad calórica, prestando especial atención a que se mantengan en su peso ideal. Consultar con su veterinario de confianza es el mejor paso para personalizar la dieta de su perro o gato y asegurar que pasen un otoño e invierno saludables y cómodos.