Así nació la famosa capirotada, postre tradicional en Semana Santa

Bien dicen que no existe Semana Santa sin una deliciosa Capirotada, postre típico de la temporada. Pero, te has preguntado ¿de dónde viene la capirotada?, ¿Por qué la comemos en Semana Santa? o ¿Cuál es su significado? Aquí conocerás todo esto del tradicional postre de Cuaresma. Aprende cómo hacer capirotada tradicional mexicana: Paso a paso. 

Cabe destacar que la existen diferentes recetas de capirotadas, según la región donde se consuma. Aunque es un postre muy antiguo en México, no se tiene registro claro de donde se comenzó a hacer. Sin embargo, Nuevo león y Jalisco son los estados donde se puede prepara con mayor frecuencia en marzo y abril.

La receta original de la Capirotada se compone de las sobras de pan duro que quedan de los días anteriores. Por algo se le conoce como un postre fácil y económico en México.

Historia de la capirotada

Este postre tiene sus orígenes en España. Sin embargo, existen pruebas de su existencia en la Roma Antigua con una receta con trozos de pan bañados con vinagre, agua, seguido de pollo, queso, pepinos y alcaparras. Pero es en España cuando este platillo se consolido como en México.

Inicialmente se preparaba con ingredientes salados y embutidos. Pero en su llegada a la Nueva España, durante la Conquista se convirtió en un postre dulce.

Significado de la Capirotada

Capirotada se deriva de “capirote”, la palabra con que se conoce a los gorros altos y puntiagudos que usan ciertos sacerdotes en las procesiones de Semana Santa. Sin embargo, su significado va más allá.

• El pan viejo: Hace alusión al cuerpo de Cristo, un poco desmejorado.
Te recomendamos este video
• La miel de piloncillo: Asemeja su sangre.
• La canela: Es la madera de la cruz donde se le crucificó, los clavos y las herramientas en que se le aseguró.
• Queso: Hace recordar la manta blanca con la que se le cubrió en su sepultura.

¿Por que se come la capirotada en Semana Santa?

De acuerdo a la religión, se come capirotada para recargar energía y poder cumplir con todas las actividades que demanda el día, gracias a la mezcla de ingredientes tan peculiares.

Además, se preparaba este postre para aprovechar toda la comida sin desperdiciar ningún alimento. Acciones que formaron una cultura de no desperdicio en Semana Santa.